¡Hola!
Hace un tiempo escribí un post, por expreso deseo de un hombre al que yo tenía como un auténtico caballero, un post sobre moda de hombre. En aquella entrada, "Be a gentleman", intentaba dar algunas pinceladas sobre como debía vestir un hombre que necesitara ir "hecho un pincel" sin perder el toque chic. Y todo esto, pensando siempre en él, en la persona que me había inpirado y animado a escribir, por primera vez, sobre hombres.Ya han pasado unos meses de aquello y aquella persona que decía, por aquellas fechas, ser un caballero se convirtió en lo que realmente era: un hombre corriente, de esos que sólo piensan en ellos.
Y es que siempre nos han dicho desde pequeños, que los caballeros abren las puertas a las
señoras y les dejan pasar primero; que siempre hay que
acomodar a tu chica cuando vas a un restaurante o dejarle tu silla si se quedan sin ninguna en una barra o que siempre pagan ellos. Estos códigos llevan vigentes desde que el perfecto caballero dejó de se mono y optó por ponerse un traje. Quizás las mujeres no nos desmayemos al verlo,
pero sí que nos podemos derretir al ver sus impecables modales. La idea es conquistar, no sólo a primera vista, sino también con algo de trabajo de fondo.
Según la RAE, la definición de gentleman sería algo así: “Caballero inglés de cierto rango social u hombre que se le asemeja en porte, comportamiento y actitud”. Me quedo con aquello de porte, comportamiento y actitud. Portes, comportamientos y actitudes y en definitiva, maneras que estamos perdiendo. Y es que, ¿tan dificil es hablar las cosas? ¿Os estimula en demasía marcharos despidiéndoos a la francesa?
Supongo que esto pasará en ambos sexos, pero claro, a mí (de momento) los que me importan son los gentlemans de pacotilla. Y también supongo que serán las fechas navideñas, que me tienen ya un pelín tocada, o la necesidad que tengo de desahogarme lo que me ha llevado a soltaros (si es que alguien me lee) este rollazo.
Y nada... Que yo me quedo sentada, esperando que algún hombre de verdad me acompañe en la mesa ;)
Besos y disfrutad mucho de cada momento, que nunca se sabe cuando va a terminar.
Supongo que esto pasará en ambos sexos, pero claro, a mí (de momento) los que me importan son los gentlemans de pacotilla. Y también supongo que serán las fechas navideñas, que me tienen ya un pelín tocada, o la necesidad que tengo de desahogarme lo que me ha llevado a soltaros (si es que alguien me lee) este rollazo.
Y nada... Que yo me quedo sentada, esperando que algún hombre de verdad me acompañe en la mesa ;)
Besos y disfrutad mucho de cada momento, que nunca se sabe cuando va a terminar.
Solo es cuestión de tiempo, ya veras como antes o despues aparece ese caballero. ;-) Fuerzas!!
ResponderEliminarTodo es cuestión de fe, no? Jejejeje... Bueno, no busco nada. Simplemente me limitaba a soltar todo lo que llevaba dentro desde hace meses :P
ResponderEliminar